Agencia Estatal Boletín Oficial del Estado

Ilustrísimos señores:

En uso de las facultades que me confiere el artículo 22, número 5 de la Ley de Régimen Jurídico de la Administración del Estado, y previa aprobación del Ministro de la Gobernación, he tenido a bien disponer:

Primero.‒Se delega en el Director general adjunto de Seguridad la facultad sancionadora que me confiere el número 2 del artículo 19 de la vigente Ley de Orden Público, y hasta el límite máximo de 250.000 pesetas.

Segundo.‒Se delegan en el Director general adjunto de Seguridad las facultades resolutivas que me conceden las normas sexta, séptima y octava del artículo 21 del vigente Reglamento Orgánico de la Policía Gubernativa, relativas a recompensas y permisos de los componentes de sus Cuerpos; a la entrada de nacionales y extranjeros y la resolución, cuando así proceda, sobre la expulsión de los mismos; la expedición de los documentos necesarios, en su caso, así como cuanto atañe a la expedición y renovación del documento nacional de identidad, organizando su servicio y con facultad de sancionar las infracciones que se cometan en su respecto, de acuerdo con la legislación vigente.

Tercero.‒Se delega en el Director general adjunto de Seguridad y Comisario general de Orden Público la facultad de expedir licencias y permisos para la tenencia y uso de armas, así como intervenir en la fabricación, transporte, comercio, tenencia y uso de explosivos, conforme a las normas que regulan la materia.

Cuarto.‒La facultad sancionadora establecida en la norma décima del aludido artículo 21 del Reglamento Orgánico se delega en el Director general adjunto de Seguridad hasta su máxima cuantía de acuerdo con la legislación vigente, y en el Jefe superior de Policía de Madrid hasta la cuantía de 5.000 pesetas cuando se trate de hechos, en lo que a este último se refiere, ocurridos en el ámbito de esta provincia.

Quinto.‒Se delega en el Jefe superior de Policía de Madrid la facultad de sancionar, hasta el límite máximo de 5.000 pesetas, las infracciones cometidas en materia de reuniones, manifestaciones y demás actos públicos, asociaciones y sus actos, espectáculos públicos, hospederías, cafés, bares y establecimientos análogos, y referido todo ello a la provincia de Madrid.

Sexto.‒La delegación de facultades a que se refiere la presente disposición se estima sin perjuicio de que, en cualquier momento, el Director general pueda recabar para sí el conocimiento y resolución de cuantos asuntos comprendidos en ella considere oportunos.

Séptimo.‒La presente disposición entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el «Boletín Oficial del Estado».

Lo digo a VV. II. para su conocimiento y efectos.

Dios guarde a VV. II. muchos años.

Madrid, 12 de enero de 1976.‒El Director general, Víctor Castro Sanmartín.

Ilmos. Sres. Director general adjunto de Seguridad, Comisario general de Orden Público y Jefe superior de Policía de Madrid.